La Comunidad renueva su apoyo a la casa de acogida Oikía de Bolivia, dirigida por José Cervantes
El sacerdote murciano y columnista de este periódico fundó Oikía en 2007 y ha recibido el Premio de Cooperación Internacional Región de Murcia
Martes, 1 oct. 2024. REDACCIÓN
La Consejería de Presidencia, Portavocía, Acción Exterior y Emergencias renovará un año más su apoyo económico al proyecto educativo que desarrolla Cáritas con niños y jóvenes en situación de calle en Santa Cruz de la Sierra (Bolivia).
El consejero, Marcos Ortuño, se reunió este lunes con el cooperante y misionero murciano José Cervantes, director del centro de acogida Oikía, que trabaja en esta ciudad como vicario en la oarroquia de Cristo Misionero, que ha logrado un impacto muy positivo en la vida de más de 380 jóvenes, brindándoles una oportunidad de una vida digna. José Cervantes es columnista de ALCANTARILLA DIGITAL, donde publica semanalmente su Reflexión Dominical. También asistieron al encuentro José Antonio Planes, director de Cáritas Diócesis de Cartagena, y Julián Párraga, presidente de la asociación de apoyo a los niños de Bolivia vinculada a Oikía.
“Esta iniciativa debe verse como un modelo de cómo las instituciones pueden colaborar para cambiar el curso de la historia para aquellos que más lo necesitan”, explicó Ortuño, quien mostró la disposición del Gobierno regional a seguir “brindando apoyo institucional para que Oikía continúe siendo un pilar en esta región de Bolivia, proporcionando servicios de salud, educación y formación profesional a los menores que acoge”. Esta iniciativa cuenta con el apoyo del Gobierno regional desde 2021, y en este tiempo ha recibido una ayuda cercana a 100.000 euros.
El sacerdote Cervantes fundó Oikía en 2007. Desde entonces, la casa de acogida ofrece un entorno seguro, educativo y de apoyo a niños y jóvenes en situación vulnerable.
Distinguido con el premio Cooperación Internacional de la Región de Murcia 2022, el proyecto educativo atiende a niños y niñas en situación de calle entre los 8 y los 18 años y su pedagogía se fundamenta en la dignidad de la persona humana, el respeto y el amor a la vida, la libertad, la justicia social y la solidaridad comprometida con los más pobres.
Las actividades incluyen asistencia médica diaria, compra de medicamentos y adquisición y preparación de alimentos y productos de higiene. El proyecto Oikía, cuyo nombre significa ‘hogar’ o ‘casa’, desarrolla programas educativos y de formación profesional, como apoyo escolar, talleres de manualidades y formación en carpintería, promoviendo el desarrollo académico y habilidades prácticas para la futura inserción laboral de los jóvenes.
El equipo multidisciplinar, compuesto por médicos, educadores, cocineras y otros profesionales, trabaja coordinadamente para asegurar la ejecución efectiva de las actividades programadas y su adaptación a las necesidades de los beneficiarios.
Este proyecto les ofrece alojamiento nocturno, comida, aseo y primera atención médica en régimen de albergue, y les inicia y forma en actividades adecuadas a sus edades, mediante talleres ocupacionales de tipo laboral, recreativo, cultural y deportivo.
El hito del primer universitario
El padre José Cervantes, nacido en Yéchar, pedanía de Mula, en 1957, es un sacerdote misionero que ha dedicado su vida a trabajar por los más necesitados. Su vasta formación intelectual incluye doctorados en Filología Clásica y Teología Bíblica, además de licenciaturas en Filosofía y Letras y Sagrada Escritura. Desde hace años ha sabido compaginar su labor como profesor y estudioso de la Sagrada Escritura con su trabajo como misionero en el barrio Plan 3000 de Santa Cruz de la Sierra, Bolivia.
Uno de los logros más destacados del proyecto emprendido por Cervantes es que uno de los primeros residentes de Oikía logró acceder a la Universidad en 2022, un hito que demuestra el impacto positivo que tiene este proyecto en la vida de los jóvenes y que sirve como ejemplo inspirador para los demás beneficiarios.